Christian von Koenigsegg, el fundador de la empresa Koenigsegg Automotive AB, se interesó desde niño por todo lo relacionado con el automovilismo. Este perseverante emprendedor sabía desde el principio que el diseño, los conocimientos técnicos, la cooperación estrecha con proveedores y la calidad son factores fundamentales para fundar una marca de autos deportivos. KAESER es proveedor exclusivo de la fábrica central de Koenigsegg en Ängelholm (Suecia).
Desde sus inicios, en 1994, Koenigsegg ha fabricado 18 modelos distintos. En estos momentos se producen diez variantes. Los modelos básicos actuales llevan los sugerentes nombres de Gemera, Jesko y Regera. Koenigsegg se cuenta entre los líderes en la fabricación de autos deportivos de todo el mundo. Pero aunque pueda parecer que estos bólidos están diseñados solo para carreras, lo cierto es que se pueden conducir por carretera con toda normalidad. Koenigsegg ha batido en varias ocasiones récords de velocidad, por última vez en 2019, cuando el Regera marcó un nuevo mejor tiempo en la aceleración de 0 a 400 km/h. No obstante, supone una dura lucha ser siempre el más rápido, mantener siempre el récord.
Muchas piezas de los motores Koenigsegg se fabrican de fibra de carbono.
Las llantas de fibra de carbono son ligeras pero muy resistentes.
Centros de producción únicos
Al entrar en los centros de producción de Koenigsegg, uno se siente como en un laboratorio de alta tecnología. Todo parece casi estéril, instalaciones de producción de última generación por todas partes, salas luminosas y limpias, orden y pulcritud se mire donde se mire. La producción está dividida en distintas estaciones. Los autos de Koenigsegg están hechos en gran parte de fibra de carbono, un material extremadamente ligero pero muy resistente. De él están hechas partes del motor, la carrocería, las llantas y el volante, lo cual permite fabricar hipercoches y superdeportivos potentísimos, pero de una ligereza incomparable.
En la sala de compresores, delante de un compresor de tornillo SK 25 (de izquierda a derecha): Christian Olsson (Koenigsegg) con Roland Olsson (KAESER KOMPRESSORER Suecia).
Diseñar y fabricar autos deportivos de este tipo es un gran reto, y la calidad en toda la cadena de producción, un requisito inexcusable. Esto vale también, por supuesto, para el aire comprimido, que se consume en grandes cantidades en la producción de Koenigsegg, empezando por el suministro en las zonas abiertas de la producción y en la planta de lacado. En llamados autoclaves, que tienen el aspecto de hornos de gran tamaño, se calientan los distintos componentes de fibra de carbono a una presión de 6 bar durante unas 6 horas a 120 grados celsius. Tal y como se pudo constatar en una auditoría de aire comprimido en el año 2018, existía un amplio margen de mejora en la antigua estación de compresores: “Uno de los compresores que teníamos de otra marca dejó de funcionar, pero también era hora de renovar toda la estación para actualizar su estado técnico. Por eso solicitamos presupuesto a varios fabricantes”, nos explica el director de mantenimiento, Christian Olsson. “Al final, teníamos que decidirnos entre un fabricante de compresores sueco y KAESER. La solución completa de KAESER nos convenció por la extraordinaria calidad de sus productos y por las interesantísimas condiciones de su contrato de mantenimiento. De modo que KAESER ganó la carrera”. En 2018 adquirieron un primer compresor de tornillo KAESER modelo SK 25 (presión de servicio 6 bar, caudal 2,16 m³/min), al que le siguieron otros cinco, el último a principios de este año. Ya está planificada la compra de otros compresores KAESER para el futuro.
“La solución completa de KAESER convenció por la calidad de sus productos y por las condiciones del contrato de mantenimiento.” Christian Olsson (Director de mantenimiento de Koenigsegg, Ängelholm)
Expansión y rápido crecimiento de la producción
La demanda de autos de la marca Koenigsegg no para de crecer. Esta tendencia se afianzará en un futuro, en gran parte por el nuevo modelo híbrido eléctrico de cuatro plazas que se encuentra actualmente en desarrollo y que responde perfectamente a la demanda actual de sostenibilidad en la rama del automóvil. Y paralelamente al negocio, crecerá también la necesidad de superficie para la producción. La planificación para los próximos dos años prevé la ampliación de la superficie total de producción a aprox. 30.000 m². De hecho, ya ha comenzado la construcción de una nueva nave de producción, una nueva planta de lacado y un almacén (1000 m²). El suministro de aire comprimido en los nuevos edificios correrá de nuevo de la mano de compresores de tornillo KAESER. “Como estamos tan satisfechos con los conocimientos y el servicio de KAESER, seguiremos trabajando con ellos en el futuro”, anuncia Christian OIsson.
El interior de los coches Koenigsegg también impresiona por su magnífico diseño.
Los compresores KAESER proveen todo el aire comprimido en la fábrica.
Las piezas de fibra de carbono se calientan
en autoclaves a 6 bar de presión.
Fotos fuente: KAESER Kompressoren, KOENIGSEGG AUTOMOTIVE AB, Ängelholm